miércoles, 12 de octubre de 2011

Silencio ensordecedor


Jorge Perianes

Categorías, Abierto X Obras

Matadero, Paseo de la Chopera 14, Madrid

Por Manuel Álvaro Mora

¿Qué es el guapo sin el feo, lo grande sin lo pequeño, o la vida sin la muerte? Nada. Son contrarios que forman parte de una misma idea, que no se entienden sin el otro, incapaces de existir por sí mismos. Ya lo decía Heráclito (535 a.C.) con su teoría de los opuestos: existe una “discordia” entre los opuestos, que genera un equilibrio entre ellos, y si uno de ellos desapareciese se establecería el dominio completo del otro y el mundo perdería la armonía, quedando así destruido.

Esto es lo que intenta transmitirnos Jorge Perianes (Orense, 1974) en su nueva obra, Categorías, expuesta en la sala Abierto X Obras en El Matadero de Madrid. Una estructura creada específicamente para la sala y para un visitante, que nada más entrar puede ver casi en su totalidad lo allí creado. Dividida en dos niveles, la sala se encuentra llena de estos conceptos de contrarios, que nuestro cerebro capta de forma inconsciente. Nos vienen a la mente ideas y cavilaciones casi irrisorias, preguntas sin respuesta o sentimientos insospechados. El escenario cobra vida a tu paso, tu eres el escenario y de alguna manera el creador de todo, ya que sin ti la obra no tiene sentido, no encuentra su finalidad. El juego de sombras y luces, como si se tratasen de pequeños flases de recuerdos que tratan de entrar y hacerse un hueco en tu memoria; el suelo a medio construir en los laterales y los restos de materiales ya usados; las plantas que crecen en la zona iluminada y que esconden sus raíces en las sombras… Todo ello se entiende también como una gran metáfora sobre la vida y la muerte. La vida simbolizada por la luz, las flores y plantas que crecen gracias a esta, una estructura sólida por la que caminar, una situación más elevada. Mientras que la muerte se representa en las sombras de la parte inferior, en la cual han entrado las raíces, el polvo y los restos de lo que en un tiempo fueron vigas de madera, los crujidos del suelo que llegan desde la zona iluminada, notas la presencia de los que caminan sobre ti, pero ellos no perciben que alguien los observa.

La muerte, el olvido, el tiempo pasado, la suciedad, la oscuridad se enfrentan a la vida, el recuerdo, el presente, el orden y la luz, en una lucha de titanes en la cual no habrá ni vencedor ni vencido. Si a todo esto le añadiéramos como banda sonora las Variaciones Goldberg de Johann Sebastian Bach lograríamos un espacio situado fuera del tiempo y del espacio, una unión entre luz, y sombra del cual sería difícil escapar sin querer permanecer un rato más.

Perianes logra crear un espacio personal y un refugio para la conciencia de cada uno, en el cual puedes dejar divagar tus pensamientos sin temor a que nadie te los robe. Acordes imperfectos de una partitura que parece a medio terminar.

Como dice Heráclito “A todo hombre le es concedido conocerse a sí mismo y meditar sabiamente”.

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