lunes, 24 de octubre de 2011

Una gran artista llama Sociedad.


Lygia Pape "Espacio imantado"
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
C/ Santa Isabel, 52
Por: María del Mar Vázquez de la Fuente


Inmersos en una sociedad cultural en la que el artista es el que experimenta el arte, la brasileña Lygia Pape se atreve a hacernos entrar en una sociedad cultural paralela en la que el espectador es la figura que interactua con el arte.

No podríamos comenzar la crítica de otra forma que no fuera hablando de los importantes acontecimientos que se dan en el país. Brasil se encuentra en un momento de esplendor en el cual se producen numerosos cambios que llevarán a una modernización que ayudará a su desarrollo.
Lygia Pape quiere representar esa renovación en su arte neoconcretista.

Según vemos sus obras, nos impresiona que muy alejado que aquello que entendemos por el arte “individual” nos encontramos series de piezas que son semejantes entre si, casi complementándose. Representando la similitud y la pluralidad, nos hace entender la importancia de la unión y la conexión entre las cosas que nos rodean. Se van entramando como una red de pescador cuya finalidad solo es atrapar nuestra atención y que reflexionemos sobre la mecanización a la que se ha visto sometida el arte.

No quedaría completa la crítica sin mencionar la complicidad que tiene el arte con el público. La obra tiene que tener vida propia y relacionarse con el espectador directamente.

Las creaciones de Lygia Pape siempre quieren salir o escapar de ese plano bidimensional y proyectarse en un espacio.
El juego que produce esta técnica es asombroso: se crean sombras, y a su vez aparecen nuevas figuras que surgen por azar y no por creación del artista, tiene distintos puntos de vista según se observen, surgen formas de donde aparentemente no las hay...

El uso de colores tan llamativos captan nuestra atención y junto a su constante cambio del uso de tamaños (de cuadros minúsculos a figuras geométricas gigantes) hacen que el espectador experimente la sensación, ya no solo de que la obra salga de sí misma, sino que ellos se adentren en la obra.

Como no puede ser de otra forma, la exaltación de la cultura brasileña estará presente también en sus obras, mostrándonos imágenes de su cultura y de sus antepasados, de sus costumbres...

También crea un arte que podríamos definir de reivindicativo, el cual quiere huir de la represión a la que estaba sometida la población brasileña, llevándola a escena con gente saliendo de unas cajas con membranas, escapando de aquello que les tiene encarcelados y les oprime.
Se podría decir que la voracidad y la crueldad de aquella época queda debidamente plasmada en esas cucarachas atrapadas y esas hormigas devorando un trozo de carne cruda.

En sus numerosos videos podemos observar tendencias sugerentemente creativas, desde la sensualidad de unos labios masculinos de rojo a videos basados en la población indígena brasileña.

Sin duda alguna Lygia Pape es una artista que en su exposición “Espacio Imantado” nos muestra que el arte requiere de la complicidad de la sociedad y de su historia, y que la sociedad por el contrario esta en un contexto cultural.

No hay comentarios:

Publicar un comentario