Avelino Sala: Blockhouse. Sobre la construcción de un espacio de resistencia en tiempos de indolencia.
Galería Raquel Ponce. C/Alameda 5.
BÁRBARA GUITIÁN RIOMOROS.
“Sapere aude!”, «atrévete a saber». Usa tu propia razón, porque aprender es un reto; nos pinta de forma radical Avelino Sala.
Un reto que tiene que seguir siéndolo, que tenemos que proteger. Los obstáculos que hay a lo largo del reto nos suponen el conocimiento, la sabiduría, la cultura. Nos lo demuestra con la propia frase, y con el hecho de que esté escrita en latín. ¡La cultura se hace presente!
El consejo se esconde detrás de una barricada de libros pintados de negro, como si ésta pudiese protegernos a nosotros y al mismo tiempo a la propia cultura, a este “sapere aude”, para que no perdamos el norte y sigamos siendo nosotros mismos.
Como protector de esta cultura, el autor representa imágenes de trabajadores en situaciones de conflicto, otras imágenes industriales y amenazadoras imágenes de policías armados que pretenden engullir al diminuto manifestante en miniatura, en el cual puede verse reflejado al propio autor, una vez más en primeras filas de la batalla, sobre un pedestal de libros, en la cima de la cultura. Así, la exposición toma energía representando indolencia y movimientos de reacción. La batalla será tomada frontalmente.
El arte contraataca, se defiende, pero siempre con el apoyo de los artistas.
Este búnker o barricada de libros se ve acompañado de una serie de acuarelas y gouaches sobre papel que, desde las paredes, reflejan estas escenas de violencia.
¿Qué pueden hacer unas tuercas, un periódico, un tirachinas o unas grúas en esta gran batalla? Son esas partes de la “tortuga romana”. Cada uno de ellos son un escudo que se unen y se protegen para así atacar de forma definitiva.
Así llegamos a la reivindicación por parte del artista asturiano al problema de los astilleros de Gijón. Dibujando una gran acuarela con dos grúas que podemos ver repetida de camino al piso de abajo, junto con estas “armas” protectoras, que, además de proteger –como ya hemos dicho- a la cultura, sirven para atacar a los recortes y el rechazo de los sindicatos. Forman parte de esas manifestaciones en vano, pues al final los astilleros cayeron.
“Concedo nulli”, «no cedo ante nadie», afirma de forma tajante una figura de brazos cruzados que oculta su rostro tras un pañuelo. Se trata de uno de los “guerreros” que contraataca.
Toma la fuerza para hacer frente a lo que se ponga por delante. Saldremos de cualquier crisis, porque no parará de protegerlo como artista.
No sólo el arte y el artista, sino nosotros mismos debemos proteger esta cultura. La exposición en cierto modo hace referencia a la violencia. Sin embargo, la forma de protestar sería incentivar la cultura, acercarla a los políticos y “luchar” junto a ella invirtiendo económicamente.
Como dijo Borges: “Si la noche es tan oscura que no llegas a divisar tus propias manos, puedes estar seguro de que el alba está muy cerca.”
Debemos luchar hasta el final, por muy oscuro que veamos todo, porque siempre podemos “ganar” esta batalla, al lado de la cultura.
¡Lucharemos y resistiremos, juntos!
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